La Coeducación es un término para los que no
se encuentran en el mundo de la educación les puede resultar extraño, pero para
los maestros, profesores y demás personas dentro del oficio de educador tiene
que ser algo que estén obligados a conocer.
De una manera simple podríamos decir que esta
palabra es el nombre que se le puso a buscar la igualdad entre niños y niñas,
pero si lo dijéramos de esta manera estaríamos dejándonos muchas cosas por el
camino.
‘Por coeducar entendemos educar en igualdad,
es decir, encaminar la educación hacia el logro de la eliminación de las
barreras que impiden o restringen la igualdad de oportunidades de cada persona.
La escuela ha de ser compensadora de desigualdades. Compensadora y
transformadora de una realidad que arrastra la herencia injusta de una
construcción social prehistórica que mantiene el papel subsidiario para las
mujeres y que imposibilita el desarrollo de las capacidades de mujeres y
hombres’. (Morales Reina. A).
También vemos como algunos institutos y
autores definen a la coeducación como un método educativo en el que se parte de
la igualdad entre hombres y mujeres, sin tener ningún motivo para la
discriminación de ninguno de los sexos.
Por la tanto, podemos decir que la
coeducación es buscar la igualdad educacional entre hombres y mujeres, de
manera que la interacción entre ambos será armónica e igualitaria. Pero para
que esto sea algo que vemos totalmente real, todavía quedan por hacer muchas
reformas educativas, crearlas y desarrollar programas de igualdad de género ya
que esto no solo sirve para la vida escolar, sino también en la futura vida
adulta que tengan los niños.
HISTORIA HASTA DÍA DE HOY:
En el siglo 18 surgió un cambio en la
educación, por aquel entonces la iglesia ejercía una gran influencia en la
sociedad y por tanto también la educación. Dentro de este ámbito la iglesia era
la que establecía el destino de hombres y mujeres, es decir, decidía los roles
de cada uno dentro de la sociedad.
A causa de esto se decidió que lo que las
niñas debían aprender era un oficio más que una educación. Pero a esto se le
añade el hecho de que por los roles de sexos, las mujeres por ejemplo, iban a
escuelas de barrio donde aprendían a coser, etc.…
Pero Aunque pueda parecer que solo era una
idea que se llevara a cabo y nada más, llego a estar presente como una
legislación legal en aquella época en la que los niños y las niñas tenían una
educación diferenciada. Es por esto que las niñas más que en sus derechos, se enfocaban
en que aprendiera las tareas del hogar y el cuidado de la familia.
Avanzado dentro del siglo 19, en el año 1821
concretamente surgió el reglamento general de instrucción pública, en el que se
prohibían las escuelas con ambos sexos.
No es sino hasta 1857 cuando se declara el
derecho por parte de las niñas a tener una educación igualitaria con los niños,
ya que hasta entonces las niñas seguían aprendiendo el cuidado del hogar y la
familia mientras que los niños aprendían a leer y escribir. Es entonces cuando
se estableció de manera obligatoria una educación igualitaria entre niños y
niñas de los 6 a los 9 años y con maestros profesionales, aunque eso sí, las
escuelas seguirían siendo de un solo sexo. A esta ley se le daba como nombre ‘ley
Moyano’.
Los debates y polémicas respecto a este tema
fueron muchos y muy diversos, pero no fue hasta 1892 que veríamos a las
primeras mujeres defender las escuelas mixtas basadas en la razón y en la
igualdad.
A partir de aquí en
cuando se empiezan a plantear las primeras propuestas reales sobre la igualdad
entre mujeres y hombres para que ambos recibiesen una educación equivalente.
Ya dentro del
siglo 20 se observa un gran cambio y evolución dentro del sistema educacional.
Tomando esto como referencia muchos lo denominaban como ‘el siglo de las
mujeres’.
A partir de experiencias de escuelas
racionalistas y laicas, se empieza la práctica de la coeducación en varias
escuelas por parte de la escuela Moderna de Ferrer, situada en Cataluña. Esta
iniciativa se hizo de una manera privada y libre en enseñanza, es decir, en
escuelas públicas y privadas. Esto fue el antecedente a la segunda republica y
el gobierno autónomo de la Generalitat Catalana y estructurado bajo un modelo
de escuela mixta.
Pocos años después de finalizar esta
incoativa en forma de experimento, se empezaron a hacer reformas en la ley
educacional de la época. En 1909 se estableció la obligatoriedad de estar hasta
los 12 años en las escuelas, esto aumento el número de mujeres escolarizadas y
se redujo el analfabetismo. Después en 1910 la real orden del 8 de Marzo
permitió la entrada de las mujeres en la universidad.
Estas reformas permitieron que cada vez más
mujeres recibiesen una educación digna e igualitaria con la de los hombres. En
el primer tercio del siglo 20 no solo aumento el número de mujeres con
educación obligatoria, también las mujeres con estudios superiores e idiomas,
pero esto no fue lo único que se logro, también se abrieron escuelas únicamente
para mujeres en la que se impartían de forma simultánea estudios de
bachillerato y de magisterio.
Pero no fue hasta 1936, inicio de la guerra
civil, que se implanto el modelo de escuela mixta. Esto finalmente ocurrió por
un Decreto que surgió en la Generalitat en 1936 en el que se establece la
coeducación en las escuelas de primaria catalanas y se extiende al año
siguiente a lo largo del país.
Al finalizar la Guerra se volvió al inicio de
todo, en donde se proponía que las mujeres debían ser educadas para el cuidado
de hogar y la familia. Para comprender la ideología que se manejaba en esos
tiempos podemos leer en el libro de Matilde Ruiz García (la mujer y su hogar)
que la mujer no haga gala de sus conocimientos si es que los posee, ya que a
los hombres les gusta sentirse superiores a la mujer con la que han decidido
estar.
Nos es hasta 1970 cuando surge una nueva ley
de educación general, en la que debido a transformaciones económicas y
sociales, se anula la prohibición de las escuelas mixtas y surgen nuevas leyes
que favorecen la extensión de las escuelas mixtas.
Es a partir de los años 80 cuando se
consolida la presencia femenina en la educación en todas las etapas y niveles
educativos, llegando incluso a superar a los hombres.
Ya en 1990 la ley orgánica general del
sistema educativo reconocía la desigualdad que existía entre hombres y mujeres
en el sistema educativo, y estableció el hecho de que había que reconsiderar el
establecer una igualdad en todos los aspectos de la vida escolar. Finalmente
estos se recogieron en los currículos y se incorporo a las metodologías y así
potenciar la coeducación.
A día de hoy la coeducación sigue
implantándose en la vida escolar, pero todavía se hacen reformas en el sistema
educativo ya que sigue sin haber una igualdad educativa total.
Todo esto lo podemos ver
reflejado en el siguiente vídeo, en el que unos alumnos de magisterio hicieron
un vídeo hablando del tema a la vez que le ponían un toque de
originalidad